Veggie, uno de los casos más complejos bajo tratamiento por moquillo canino, continúa mostrando avances significativos. Actualmente, debido a la notable disminución de secreciones nasales y oculares, el protocolo respiratorio fue ajustado y se redujo la frecuencia de nebulizaciones a una sola vez al día.

En los últimos días, no ha presentado fiebre, vómito ni signos de recaída, lo cual indica una estabilidad progresiva en su estado general. Sin embargo, persisten las mioclonías (movimientos musculares involuntarios) en mandíbula y cráneo, secuelas neurológicas típicas en pacientes que han superado la fase aguda del distemper.

🔬 Frente a estas secuelas, el equipo veterinario ha sugerido a futuro la aplicación de toxina botulínica (botox veterinario) como alternativa terapéutica. Este procedimiento tiene como objetivo reducir la intensidad y frecuencia de los movimientos involuntarios, mejorando así su calidad de vida sin necesidad de sedación permanente o fármacos de control neurológico más agresivos.

¿Qué beneficios tendría la toxina botulínica en Veggie?

✔️ Disminuye las contracciones musculares involuntarias que afectan su descanso y alimentación.
✔️ Mejora el control motor, permitiendo mayor estabilidad neurológica.
✔️ Es un procedimiento seguro y reversible, ideal para animales en recuperación prolongada.

Aunque su estado ha mejorado, Veggie aún no está listo para salir del aislamiento, dado el riesgo de contagio que representa en la fase postviral del distemper, que puede durar hasta 90 días.

📌 Con cada avance, su recuperación se fortalece, pero seguimos necesitando apoyo para cubrir tratamientos médicos, terapias complementarias y evaluaciones especializadas.

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